Lobos: para disfrutar desde la tierra hasta el cielo

lobosLa bonita ciudad de Lobos recibe a sus visitantes con muchas posibilidades para disfrutar. En la ciudad, el campo, la laguna y hasta en sus cielos.


Lo primero que encontraron los exploradores al llegar a la laguna allá por el siglo XVIII, fue una importante población de nutrias a las que conocían como lobos de agua o de río.

En 1740 el Rvdo. Padre Folkner integraba la Misión Jesuítica que partió a explorar el centro y sur de la actual provincia de Buenos Aires, con base en sus escritos, se confeccionó en Londres, en 1772 la primera carta geográfica de la zona, allí junto al espejo de agua aparecía la identificación: “L.Lobos”.

Eran épocas de fortines y fronteras, que con el correr de los años se transformaron en localidades de la provincia. En 1779 se reconstruyó el Fortín de San Pedro de Los Lobos en el margen norte de la laguna.

Estaba formado por unos cuantos ranchos de barro y paja, sin puertas ni ventanas, rodeado por una defensa de palos a pique y un mangrullo.

Hacia 1802, Don José Salgado, que había recibido del Virrey, tierras para trabajar, construyó una capilla a dos leguas del fortín. El 2 de junio de ese mismo año, queda en la historia como el día de la fundación de la ciudad de Lobos,

Las familias, hasta entonces dispersas en chacras comienzan a instalarse en sus cercanías y junto al camino de las carretas, de allí surge la necesidad de delimitar la traza del pueblo.

En 1804, un vecino, Don Ramón de Urquiola, con el apoyo del Cura Párroco Don José García Miranda, solicita la traza del pueblo de San Salvador de Los Lobos y la demarcación de un terreno para el ganado de la Iglesia.

Siete años después, en 1811, obtienen la delimitación del Pueblo de San Salvador de la Guardia del Partido de Lobos.

Un lugar para vivir

“Lobos es una ciudad muy tranquila y con excelente calidad de vida. Aunque el crecimiento que ha experimentado hizo que aparecieran episodios delictuales, los chicos pueden andar libremente por sus calles y plazas y la bicicleta sigue siendo un medio de traslado muy utilizado, también para ir a las escuelas” nos cuenta el Dr. Jorge Chiabaut, Presidente del círculo Médico de Lobos, quien llegó a la ciudad hace 36 años y hoy nos cuenta que siente “este pago como mi lugar en el mundo, donde tengo mis raíces y mis amigos”.

En Lobos, “la oferta educativa está ampliamente cubierta, tanto en lo público, como privado, desde salas maternales, jardines de infantes y escuelas primarias y secundarias. También contamos con institutos terciarios y de formación profesional y un Centro Universitario donde se pueden cursar materias del CBC de la UBA”, asegura el Dr. Chiabaut.

Además, nos cuenta que, si bien no cuenta con los datos estadísticos, su percepción es que los jóvenes van a las grandes ciudades a estudiar una carrera universitaria, pero vuelven a ejercer su profesión en la ciudad.

En cuanto al sistema de salud, la ciudad cuenta con “un Hospital público de gestión provincial y complejidad media y una institución privada también de complejidad media que es la única que ha sobrevivido de todas las que había en las localidades vecinas y que viene sufriendo los continuos castigos a los que se ha visto sometida la medicina privada en nuestro país en los últimos 25 años, nos informa el Dr. Chiabaut

La mayoría de los médicos trabaja tanto en la medicina pública, como privada y la totalidad de la gestión de obras sociales y prepagas se canaliza a través del Círculo Médico, que hoy cuenta con 106 médicos inscriptos. Nuestro Círculo Médico se encuentra consolidado en lo institucional, como económico y se halla insertado en nuestra comunidad, gozando de prestigio social por la cantidad de acciones comunitarias que se han implementado desde el mismo”, agrega.

Para un médico que quisiera elegir Lobos para vivir, el Dr. Chiabaut recomienda “que venga con una especialidad y adecuada formación de post grado. La mayoría de las especialidades están cubiertas y lógicamente siempre hay nichos laborales que se pueden aprovechar”.

Visitar Lobos

Su entorno natural, la belleza de la ciudad, la intensa actividad del paracaidismo que llevó a la ciudad a convertirse, por ley, en la Capital Nacional del Paracaidismo Deportivo y la infraestructura turística que crece, hacen de Lobos un destino muy atractivo para los visitantes.

“Desde varios sectores de la comunidad se esfuerzan permanentemente para que el turismo continúe creciendo y para que quienes vengan una vez a Lobos, piensen en volver”, asegura el Dr. Chiabaut.

Hay atractivos de todo tipo, en la ciudad, en la laguna, en la zona rural y en las actividades para realizar.

El Dr. Chiabaut nos hace de guía local “Recomiendo visitar los pueblos rurales: en Antonio Carboni, se encuentra la Iglesia Sagrada Familia, con su reloj francés y su campanario, construida por el Arq. Alejandro Bustillo.

Otros pueblos como Elvira, Zapiola o Salvador María, son postales de los típicos pueblos bonaerenses con las estaciones de tren, algunas hoy convertidas en Centros Culturales.

Emprendimientos como huertas, finca de arándanos y frutos rojos; son nuevas experiencias para conocer el trabajo de campo”.

En la ciudad hay atractivos imperdibles. Como siempre, conviene comenzar por la plaza principal. La plaza 1810 está ubicada frente a la Parroquia Nuestra Señora del Carmen y el Palacio Municipal. Su origen data de 1811 y los terrenos fueron donados por el primer Intendente del partido, Manuel Antonio Caminos.

En su centro se destaca el monumento a la Madre construido en 1962 por el escultor Luis Perlotti, y en 2005 se construye la fuente en la cual se encuentra actualmente.

Otros lugares para visitar en el casco histórico son la Casa Natal de Juan Domingo Perón, el Museo Histórico y de Ciencias Naturales “Pago De Los Lobos”, la Casa de José Salgado y las otras dos plazas: Soberanía y Plaza Italia.

La antigua estación del ferrocarril Sarmiento también merece una visita.

Naturaleza también

En la laguna se puede hacer de todo, avistaje de flora y fauna, alquilar botes y kayaks, práctica de kitesurf, motonáutica en zonas específicas, pesca deportiva o simplemente sentarse a mirar el paisaje o caminar por la costanera.

En los cielos, la capital nacional del paracaidismo deportivo ofrece desde vuelos de bautismo, tándems y cursos para principiantes y avanzados.

Lobos está de fiesta

Las fiestas populares son excelentes ocasiones para visitar los pueblos. En Lobos, hay varias y muy lindas. La Fiesta de la Tradición y el asado es una de ellas y reúne a la comunidad en torno al Desfile Gaucho en las calles de la ciudad y el festival en el Parque Municipal.

Las fiestas de cada pueblo son las manifestaciones culturales de cada localidad realizadas por sus vecinos y cada 2 de junio, en el aniversario de la fundación de nuestro pueblo se desarrolla un colorido desfile por sus calles, donde participan todas las instituciones, establecimientos educativos y peñas folklóricas.

También podemos mencionar la realización de las Olimpíadas de la Cuenca del Salado, donde participan jóvenes de toda la cuenca en un encuentro de tres días, con una hermosa fiesta de premiación que disfruta toda la juventud participante”.

A la hora de comer

En la gastronomía de la ciudad se ve una parte de su historia: aquella en la que los inmigrantes italianos llegaron para quedarse.

“La mayoría de esta inmigración proviene de la provincia de Campagna, -relata el Dr. Chiabaut- específicamente del área del Cilento, principalmente de las localidades de Piaggine, San Ruffo y Teggiano) y por eso las pastas pueden ser un fuerte gastronómico. Me sorprende la cantidad de fábricas de pastas frescas que hay y también dos fábricas de pastas secas”.

Pero por supuesto que Lobos está en el campo argentino y por eso “la parrilla argentina se encuentra presente en cualquier sitio” concluye Chiabaut.

 

Por toda la belleza natural, actividad cultural e infraestructura, Lobos es, sin lugar a dudas, un buen lugar para vivir o simplemente conocer y disfrutar.