Tres lugares poco conocidos para desconectarse en vacaciones. Ideales para ir pensando y también para una escapada.
Parece que falta una eternidad y, a la vez, las vacaciones se nos vienen encima. Hay muchas alternativas, pero las clásicas son la sierra, el mar o la montaña.
Nuestro país tiene muchas opciones de cada una de ellas, algunas más conocidas y otras menos.
Podemos encontrar desde lugares prácticamente deshabitados, hasta los más populares. Como siempre, en el medio hay algunos que ofrecen cierta infraestructura y a la vez la tranquilidad que muchas personas prefieren para sus vacaciones.
Aquí tres lugares poco conocidos para desconectarse.
Si la montaña no viene a nosotros, vamos a Villa Traful
Conocer Villa Traful es conocer otra dimensión de la belleza. Este precioso paraje patagónico está muy cerca de la popularísima Villa la Angostura.
Es un pueblo pequeño sobre un lago de un color inolvidable. Sus alrededores ofrecen mucho para hacer: naturaleza, deporte, turismo aventura y la paz de sentarse en las bellas playas del lago para pasar el día.
Entre los senderos, el del Cerro Negro llega a puntos panorámicos y tiene una longitud total de 10 km.
La visita a las cascadas Coa Có y Blanco son paseos muy sencillos y bonitos para apreciar un salto de 25 metros rodeado de piedras, huella de los glaciares.
Los pobladores tehuelches dejaron su legado en pinturas rupestres que tienen una antigüedad de 600 años, y buen estado de conservación, se encuentran cerca de las Lagunas “Verde” y “Azul” conocidas como Laguna “Las Mellizas” por su cercanía.
El lago ofrece un espectáculo único: su transparencia deja ver un bosque sumergido. Este paseo se realiza en una embarcación que nos lleva a la margen de enfrente de la villa. Es un imperdible.
Para descansar, desconectarse del estrés y conectarse con una naturaleza perfecta, Villa Traful es el lugar indicado.
Bahía Creek y la playa que todos soñamos
Bahía Creek es un balneario y una pequeña localidad del departamento Adolfo Alsina, en la provincia de Río Negro. Se encuentra cerca del nacimiento del Golfo San Matías, en su costa norte.
Es fácil saber por qué su nombre contiene la palabra Bahía, pero no está claro de dónde proviene Creek (arroyo en inglés). Hay diferentes opiniones. La más aceptada es que hace referencia a los hilos de agua parecidos a un arroyo o riacho que va dejando la marea cuando baja.
La bahía de agua clara está justo donde los acantilados comienzan a perder altura. Bordeada por médanos suaves y dorados, el paisaje se vuelve casi indescriptible.
La playa está habitada por la paz y la tranquilidad que eligieron el mejor paisaje para quedarse todo el año.
Pueden verse gaviotas, loros, cormoranes y toninas y en noviembre se puede ir a ver pasar a las ballenas.
La pequeña villa ya supera las cien casas y ofrece alojamientos para los visitantes. Sin embargo, no cuenta con tendido de luz, agua, ni gas, convencionales y la conexión a internet es escasa. Ideal para unas vacaciones realmente desconectadas.
De todas maneras, a solo 135 km, la ciudad de Viedma y Carmen de Patagones ofrecen todo lo necesario.
Saldungaray, el pueblo rodeado de Sierras
Las sierras bonaerenses ofrecen muchos lugares para disfrutar de un buen descanso. Algunos más conocidos como Sierra de la Ventana o Tandil.
Saldungaray es un destino menos conocido, pero no menos atractivo. Este pueblo del partido de Tornquist es el más pequeño de la comarca.
Saldungaray se ubica a orillas del Río Sauce Grande con su Balneario natural de singular calma y belleza.
El pueblo y los alrededores ofrecen una gran variedad de puntos de interés como el reconstruido Fortín Pavón que recuerda el origen de esta comunidad como puesto de defensa contra el avance indígena. Sus ocho ranchos reconstruidos proponen un viaje en el tiempo difícil de resistir, en un entorno de suma belleza.
Otros atractivos son: la Iglesia Nuestra Señora del Tránsito, en la que se encuentra la imagen de la Virgen en posición de reposo; el Portal del Cementerio de estilo Art-decó legado de Francisco Salamone y el Parque Municipal ideal para acampar a orillas del río.
La centenaria Estación de Ferrocarril de Saldungaray fue fundada a principios de siglo. Funcionó entre 1903 y 2016 y atesora elementos restaurados de la actividad ferroviaria. Actualmente se usa para trenes de carga que viajan hacia y desde Bahía Blanca.
El Viejo Mercado Comunitario, inaugurado en 1938, es otro ícono. Fue renovado en 2018 y se centra en la producción y venta de artesanía local hecha por familias de la zona.
A pocos minutos la Bodega Saldungaray produce deliciosos vinos serranos, dulces y cuenta con visitas guiadas.
También muy cerca, la fábrica de quesos Campo Udi ofrece visitas para conocer el establecimiento y comprar sus deliciosos productos recién fabricados.
Saldungaray es parte de la Comarca de la Sierra de la Ventana, que abarca a las localidades de Villa Ventana, Villa Serrana La Gruta, Sierra de la Ventana, Tornquist y San Andrés de la Sierra, todas muy cercanas para visitarlas.
Por supuesto a pocos minutos encontramos el Parque nacional Sierra de la Ventana con todas sus propuestas.
Ahora solo falta ponerse de acuerdo y preparase para disfrutar de estas propuestas que nos ofrece nuestro país.
